Cuando escuchamos la palabra amor a todos nos viene a la mente la juventud; sin embargo, en la tercera edad también se ama. Precisamente es en esta edad cuando más se necesita amar y ser amado, y aunque para muchos el paso de los años es sinónimo de perder algunas cosas, no es así, al contrario es el comienzo y renovación de muchas otras.
Es obvio, que en la tercera edad o edad dorada como suele llamarse, existen cambios fisiológicos los cuales afectan el aparato reproductor de la mujer y el hombre; en cambio, la edad no tiene por qué ahogar el placer, ya que cuando existe la convivencia, la compañía y el apoyo mutuo en la pareja, éstos pueden llegar a estar juntos hasta su vejez, razón por la cual no hay motivo para perder el deseo de hacer el amor.
Claro está, que con el paso de los años las relaciones sexuales cambian; pero cuando existen caricias, gestos y ternuras en la pareja, el corazón late fuertemente como si estuviera joven otra vez.
Además en esta etapa de la vida se toma mayor conciencia de lo que puede y no puede hacerse con el sexo, hay una mayor consolidación en la pareja y satisfacción de sentirse deseados y queridos, en fin es el momento de: dar y recibir. Según los expertos en esta materia, la tercera edad es una época donde se le puede dar riendas sueltas a la imaginación y disfrutar plenamente del sexo y de los juegos sexuales; pero a su vez recomiendan que para afrontar esta etapa con vitalidad y salud deben cumplir ciertos requisitos, tales como: tener una buena alimentación, moderar el consumo de grasa y alcohol, hacer ejercicios adecuadamente, no fumar, beber suficiente agua, leer, enseñar, participar en actividades sociales y mantener buenas relaciones.Cabe señalar, que el sexo en la tercera edad es bueno y deseable, olviden los mitos de que deseo sexual desaparece con los años, y por ningún motivo renuncien al amor y el placer en esta etapa de la vida.
